El sector turístico tenía todas las esperanzas puestas en este 2022, un año en el que las proyecciones de recuperación estaban claras y delimitadas, recuperaríamos al menos el 90% de la actividad turística, lo que significaba volver casi a la normalidad. Sin embargo, hay situaciones que nos siguen impidiendo poder recuperar del todo el flujo normal de actividades, nuevas cepas de covid y ahora más recientemente un hecho que históricamente amenaza no solo con retroceder lo que se ha avanzado sino que pone en riesgo muchos sectores de la economía tanto Española como Europea. La invasión de Ucrania por parte de Rusia ha impactado considerablemente en las reservas y avances turísticos de España.
Todos los gigantes turísticos españoles de los distintos eslabones de la cadena del sector coinciden en registrar esta coyuntura durante los pasados días, que pone freno a la racha de reservas récords las semanas previas tras remitir la pandemia en los grandes mercados emisores.
Conforme comunica el periodico digital OK Radio, desde el inicio del conflicto bélico ha habido una gran cantidad de turistas internacionales que han aflojado el ritmo de reservas en hoteles españoles notablemente. En concreto, las caídas más importantes las han protagonizado los viajeros procedentes de Polonia (-57%), Finlandia (-44%) y Noruega (-39%).
Los factores que explican este giro son el desplome del emisor ruso, la incertidumbre sobre la duración de la guerra instigada por Vladimir Putin, y el agudo encarecimiento de la energía y de los alimentos que deja a los consumidores con menos dinero para dedicarlo a viajes. Todo ello va a alterar las previsiones de las empresas turísticas sobre ingresos y gastos.
El mercado emisor Ruso, es uno de los más importantes en España, al igual que el mercado Alemán, antes de la pandemia viajaron a España 1,3 millones de turistas rusos que dejaron alrededor de 1.400 millones de euros de gasto. Si bien es difícil medir las consecuencias del conflicto en dicho mercado emisor, sobre todo porque en 2021 viajaron apenas 134.000 rusos con un gasto de 228,1 millones de euros, sí podría tener un impacto en Cataluña que es su principal destino.
Lo cierto es que como muchos expertos y estudiosos lo certifican no hay duda alguna que esta guerra, traerá consecuencias negativas para muchos mercados europeos, y muchos sectores de la economía, ya lo vemos reflejado a corto plazo, en el impacto vinculado al aumento de los costes energéticos, ya que casi en sincronía con los ataques se produjo un aumento en el precio del petróleo y del gas. El Brent subió hasta los 102 dólares/barril, lo cual no ocurría desde septiembre de 2014, y los precios del gas en Europa subieron un 7% hasta máximos de diciembre de 2021, de acuerdo a los datos de Banca March.
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